Destacarse en el mundo laboral hoy, y en un equipo de trabajo, es una tarea compleja debido a los retos que es necesario enfrentar en medio de la competitividad. Pero es más complicado aún, ganarse el respeto de los compañeros de trabajo de manera rápida y efectiva.
Entendamos por respeto, el acto mediante el cual una persona tiene consideración por otra y actúa teniendo en cuenta sus intereses, capacidades, competencias, debilidades, fortalezas, preferencias, miedos y/o sentimientos. El respeto es uno de los valores más importantes que los seres humanos pueden tener entre sí, como parte de un equipo de trabajo para apreciar lo que al otro lo hace diferente de uno, y entenderlo, para tolerar esas diferencias.
Las consideraciones hacia los demás, empiezan por nosotros mismos. El valor del autorrespeto puede ser algo que muchas veces se considera como elemental, aunque no siempre se pone en práctica. Cultivar un sentido de respeto hacia sí mismo comienza con reconocerse como un ser único, con valores y potenciales que faciliten construir relaciones sanas. Alguien que tiene autorrespeto y se trata con amor, será más tolerante con los demás.
No es posible hablar de respeto sin hablar de los demás. Para tener una sana convivencia en un equipo de trabajo exitoso, es necesario establecer límites de hasta donde llegan nuestros intereses y comienzan los intereses de los demás. El respeto es una forma de reconocimiento y de aprecio a las condiciones de otros, valorándolos inicialmente por su condición como personas y luego apreciando sus competencias, conocimientos, y experiencia, en un marco de acatamiento de las normas.
Así, es importante por ejemplo respetar las leyes viales para evitar daños a propios o a terceros, es importante respetar las leyes sociales evitando así los delitos o crímenes, es importante respetar el cuidado del medio ambiente de modo que todos podamos tener una mejor calidad de vida, es importante respetar las leyes comerciales, civiles, internacionales, etc., que componen los diversos códigos de conducta intralaborales o extralaborales, de modo tal que todas las sociedades se desarrollen al máximo potencial posible, sin pretender sacar ventaja, a costa o por encima de los intereses del otro.
Trate a los demás como quisiera ser tratado. No se puede exigir ser escuchado, si antes no es capaz de escuchar. No se puede demandar un trato justo si usted no está dispuesto a darlo. No puede exigir reconocimiento si usted no valora su entorno y las personas con quienes lo comparte. No puede pedir preferencias si usted no está dispuesto a darlo todo por su equipo de trabajo. No puede exigir consideraciones si usted no está dispuesto a cumplir con las normas de convivencia. No espere tolerancia si usted no puede tolerar.
El mundo laboral actual está siendo impactado por la escasa tolerancia hacia la diferencia. La verdadera riqueza de las sociedades modernas está en la diversidad de culturas y en esa mezcla perfecta entre razas, géneros e ideologías.
El respeto por las diferencias, ya sean de raza, cultura, religión o incluso discapacidades, no solamente es importante en un mundo cada vez más globalizado y competitivo, sino que prepara a los niños para ser solidarios, a valorar y aprender de otros, a ser tolerantes y respetuosos, y a evitar que se tomen decisiones basadas en prejuicios y estereotipos.
Empiece en su casa
Ser conscientes y respetar las diferencias que hay entre todos los miembros de la familia es el primer paso. ¿Como tratas a tus padres? ¿Qué se dice en la mesa en relación a las diversas habilidades, intereses y estilos de vida de cada uno? ¿Se valoran, aunque sean diferentes? Recuerda que la tolerancia no significa tolerar comportamientos inaceptables. Implica tratar a los demás con respeto.
El trabajo en equipo se define como la unión de dos o más personas organizadas de una forma determinada, las cuales cooperan para lograr un fin común que es la ejecución de un proyecto.
Nace como una necesidad de tener relaciones con otras personas y de complementariedad para lograr retos que no se alcanzarían individualmente. Se origina también de la idea de agilizar y mejorar algunas condiciones que obstaculizan el desarrollo de tareas diarias y la consecución de objetivos en las organizaciones.
Cuando se trabaja en equipo, se aúnan las aptitudes de los miembros y se potencian sus esfuerzos, disminuye el tiempo invertido en las labores y aumenta la eficacia de los resultados.
Un grupo de personas se transforma en equipo en la medida en que alcanza cohesión. Para ello se han de crear lazos de atracción interpersonal, fijar una serie de normas que dirijan el comportamiento de todos miembros, donde la figura de un líder es fundamental, promover una buena comunicación entre el conjunto de integrantes, trabajar por el logro de los objetivos comunes y establecer relaciones positivas.
La cohesión de un equipo de trabajo se expresa a través del respeto, el compañerismo y el sentido de pertenencia al grupo que manifiestan sus componentes. Cuanta más cohesión exista, mejor trabajarán sus miembros y más productivos serán los resultados de sus acciones.
Una de las maneras más fáciles para ganarse el respeto de todos en los equipos de trabajo es mediante la demostración de su propio valor. La estrategia es reconocer sus competencias y tratar de hacerse cargo de todas sus tareas de manera profesional, yendo un poco más allá de sus responsabilidades.
A pesar de que en ocasiones se considere una persona solitaria, si realmente quiere sentir aprecio y respeto por sus colegas debe interactuar con ellos más a menudo y preocuparse por su imagen y lo que quiera que ellos piensen de usted. Tome un interés genuino de sus comentarios, aprenda a escuchar, a ser egoente y a convertirse básicamente, en alguien en quien se pueda confiar.
Sonreír, aunque no haya ganas o motivos no es solo de hipócritas; mantener una sonrisa en el rostro en todo momento es la mejor estrategia para parecer ser una persona más accesible y amigable, y esta actitud puede ayudar a fomentar un mejor ánimo entre los miembros de un equipo de trabajo.
Mientras se hace parte del ambiente laboral y de un equipo de trabajo, es necesario tratar de ser siempre discretos y evitar involucrarse en cualquier forma de chisme. Nadie respeta a quien está en entredichos con otros. Es muy importante cuidar que la gente en su entorno mantenga la confianza que le han depositado.
La competitividad en el trabajo suele ser feroz por estos días, pero eso no es excusa para intentar conseguir una mejora a costa de algunas actitudes que podrían mermar sus principios, valores y hasta su propia dignidad. Actúe siempre con prudencia, respetándose a si mismo y haga todo lo posible por que sus resultados, su labor y su esfuerzo hablen por usted.
Diseñamos actividades puntuales para fortalecer los valores y competencias en los equipos de trabajo