El estrés antes de ser una reacción negativa para la vida es una fuerza que permite transformar las amenazas en desafíos. Esta teoría la explica la psicóloga clínica Marcela Lechuga Payá en su libro Así es la vida publicado por la editorial Grijalbo y la aplica a las situaciones que cada día tienen que enfrentar los miembros que conforman las empresas y organizaciones.
En las empresas predominan los cambios constantes, las tensiones y los conflictos, situaciones que oprimen y distraen a los miembros de las empresas. Sin embargo, aunque sea insólito, el estrés puede convertirse en un factor saludable, que impacta en la prevención del desgaste laboral y en el auto-cuidado de los equipos de trabajo.
La organización y desarrollo de eventos empresariales para mejorar el clima laboral es una buena oportunidad para reforzar el resultado de estos estudios y lograr que los participantes entiendan, de una manera lúdica, que la presión que se vive, por diferentes circunstancias de la vida, puede ser un aspecto favorable que impacta la cerebro para estar alerta, dispuesto y preparado para actuar asertivamente.
El estrés es natural. Muchos estudios validan esta sensación como un recurso necesario para lograr el éxito y un elemento imprescindible para el crecimiento personal. Los eventos empresariales son el espacio adecuado para transmitir estas ideas con el fin de facilitar y enseñar mecanismos para sobrellevar las cargas laborales.
De hecho, si el estrés no fuera favorable y natural, no se hubiera desarrollado como mecanismo de adaptación ¡La vida es estrés y el estrés es vida! Cuando se entiende esto, a través de actividades lúdicas durante reuniones empresariales, no sólo se puede salir del posible conformismo o victimización, que muchas veces los colaboradores sienten, sino que los miedos y prejuicios tienden a desaparecer. Pero ¿cuántos logran entender el estrés como algo positivo? Muy pocos, y es que aunque sea natural es, en muchas ocasiones, difícil de controlar, generando enfermedades graves e incidiendo negativamente en la productividad.
No es casualidad que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) catalogue esta sensación como la enfermedad del siglo; Para nadie es un secreto que en la sociedad actual se viven recurrentemente tensiones producidas por el ansía incontrolable de crecimiento y poder, entre otras conductas que traen como consecuencia el agotamiento general. Sin embargo, antes de satanizar el estrés, se debe potenciar para lograr que la vida laboral alcance un sentido real.
En consecuencia, se deben buscar espacios para transmitir y validar estas teorías de transformación el clima laboral y, así, los eventos empresariales llegan a ser los espacios idóneos para este tipo de reflexiones a través prácticas lúdicas y experienciales.
Consejos para manejar el estrés en equipos de trabajo:
Lo invitamos a seguir estas recomendaciones que pueden ser desarrolladas durante los eventos empresariales con mayor profundidad.
- Invierta tiempo en las relaciones interpersonales: recuerde que para generar buenos vínculos debe invertir energía en este propósito.
- Asegúrese de no estar solo en la vida: si no tiene amigos, búsquelos. Nadie puede andar solo por la vida.
- Evalúe sus actitudes frente a la adversidad. Muchas veces es inevitable pasar por momentos difíciles, así es la vida.
- Establezca buena comunicación. Dele un lugar importante a sus seres queridos, sobre todo a sus padres. Dedíqueles tiempo y muestre agradecimiento con ellos.
- Tómese el tiempo necesario para respirar y relajarse. Practique el auto-cuidado, duerma bien, no se auto medique.
- Involúcrese en las situaciones de la vida con optimismo.
- Tome los desafíos de la vida como retos y no como amenazas. Deje de preocuparse y empiece a ocuparse. Este es un buen principio de supervivencia.